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martes, 12 de febrero de 2013

La gran nevada del 2013

Este viernes pasado, día 08 de febrero, ni corta ni perezosa cogí en coche y me dispuse a subir al pueblo. Cual fue mi sorpresa al ver la gran nevada que había caído. Que precioso todo el pueblo cubierto de una fina capa de nieve. El camino estaba despejado y se podía subir sin problema hasta la entrada del pueblo, pero la pala no entraba por el pueblo, así que la carretera estaba llena de nieve apelmazada y congelada, lo cual me dificultada la subida a casa con el coche. Tras patinar un poco conseguí llegar a casa, pensando que había pasado lo peor tuve que aparcar el coche. Maldito memento. Casi una hora, espalando nieve, hasta que conseguí quitar el coche de la carretera a un lugar seguro. Seguía nevando, lo cual dejó una capa más gruesa de nieve.


Al día siguiente, ya sábado lucía el sol, brillaba la nieve y el paisaje era mejor que el del día anterior. La carretera que el día anterior había quedado más tapada comenzaba a quedar desocupada, y algunos coches conseguían subir y dar la vuelta al pueblo. La temperatura era ideal para un día de montaña y paseo entre la nieve, así que saqué al perro y me fui a dar una vuelta con él. Como buena cabra montesa me dispuse a andar por todos los sitios, cuanta más nieve mejor, y en algunas ocasiones me llegaba hasta la cadera. En todo el día no nevó, así que pensé que ya se iría toda la nieve.







Dodo, el si que sabe posar para las fotos.


El domingo fue un día bastante aburrido, ya que no paró de caer agua nieve, así que decidí quedarme el día en casa. La nieve se iba carretera abajo y los caminos quedaban casi despejados.
Al día siguiente, lunes de carnaval, había una gran nevada. Toda la noche estuvo nevando. El rastro que se había visto de la carretera estaba completamente tapado y una capa de mayor grosor la cubría. Toda la mañana estuvo nevando y lo mejor de todo fue la tarde y el gran sol que brillaba, dejándonos una bonita estampa de postal navideña. Más de una cuarta de nieve y mi gran preocupación, ¿Cómo saldría al día siguiente de allí?

La iglesia
Por la tarde, aburrida de mi y cansada de andar de aquí por allá, y viendo lo bien que estaba la nieve, suave y blandita, me dispuse ha hacer un muñeco de nieve. Tanta nieve que cogí no podía con la bola base, así que la puse a un lado de la carretera cerca de mi casa, ya que no podía con ella. Me dispuse ha hacerle la cabeza, cosa que me resulto más fácil, y luego la tarea difícil, encontrar unas piedras para hacer la boca y los ojos, pensaréis que en un pueblo es fácil encontrar unas piedras, pues no, con la nieve no encontraba las piedras, pero lo conseguí, y aquí el resultado final de mi muñeco de nieve.


A continuación os dejo unas cuantas fotos que hice del pueblo a lo largo del puente de carnaval.

Peña El  Puerto




El molino


















Peña el Palo
Y a continuación un vídeo de mi perro jugando en la nieve. Y eso es todo. Feliz día.










3 comentarios:

  1. ¡¡Es tan bonito el paisaje nevado!! Lo peor es cuando se empieza a derretir... ya te podías haber traído un poco jajaja.

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  2. Que preciosidad de paisaje. Yo también soy de león y aun no he podido disfrutar de un día tan nevado.
    Ojala que antes de que termine el invierno podamos disfrutar de una nevada. Un saludo!

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  3. ya podia nevar en la ciudad así, nunca disfrutamos de ese paisaje!!!

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